16 de febrero de 2013

DERECHOS HUMANOS - BASE NAVAL



ACERCA DE LOS LENGUAJES

LA SENTENCIA EN BASE NAVAL II



I. Ayer, a las 15:30, media hora después que el Tribunal Oral Federal 1 de la ciudad de Mar del Plata leyera la sentencia que condenara a prisión perpetua a Arrillaga, Lombardo, Marino, Pertusio, Guiñazú, Lodigiani y Forbice, y condenara con distintas penas a otros seis represores, algunos militantes del Movimiento Teresa Rodríguez comenzaron a apedrear el Tribunal. En la puerta del mismo se encontraban algunos ex detenidos, los fiscales, y otras personas. El movimiento empezó a dispersarse luego de cinco minutos cuando, increpados por varios ex detenidos, debieron retroceder.



“Conservadores” le gritaban a Gabriel, quien había testimoniado en las audiencia del 2012 y quien apunto a un “héroe de Malvinas” como uno de los torturadores. “Se les termina el negocio de los derechos humanos” gritaba a otro a un ex detenida de La Plata, una de las más coherentes durante el relato de los dos demonios en los ochenta, “no ven que dieron diez absoluciones” decían mientras una de las militantes de Hijos tomaba por el cuello a otra militantes.


Nadie había podido explicarles lo que el lenguaje jurídico escondía, o al menos cierta atención a la lectura: que algunos de los condenados a perpetua habían sido absueltos en algunos casos al tiempo que hallados responsables en la mayoría; nadie les había explicado que el camino de una Justicia en el marco del Estado de Derecho implica investigar, producir pruebas, testimonios y documentos, develar la lógica clandestina de la represión, la que une esos datos sueltos, hacerlo en cada caso y para cada uno de los crímenes cometidos.


Porque habrá habido titubeos, pero las condenas dictaminadas estaban en el marco de lo esperable por las partes, e incluso el Tribunal tomó el pedido de la Querella de Sivo, abriendo una investigación acerca de los Magistrados que rechazaban los habeas corpus, dato no menor en una ciudad donde el Juez Pedro Hooft aún tiene una indagatoria pendiente por sus participación en los Centros Clandestinos de Detención y no ha sido suspendido en sus funciones.


Viendo ese triste cambalache vino a mi cabeza la sentencia producida por el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, ejemplar sentencia, casi un techo en los que a estas condenas se refiere. A la salida de ese debate, acompañando al auto a Zulema, pasaba por delante de otros y los mimos grupos que cantaban “tribunales de cartón, justicia es la nuestra para la liberación”.


Y en ese momento, mientras Zulema me codeaba para que apurara el paso, vino a mi cabeza el cachivache del reo Etchecolatz, quien en el medio de la sentencia elevó un cartel que decía “¿Llegará el Juicio y Castigo para la Justicia corrupta?”.



II.  Uno no quisiera pensar que los extremos se unen, o que hay que callar ciertas palabras porque es hacerle el juego a otros. Uno entiende que la los lenguajes de la “derecha” saben muy bien re significar, apropiarse de otros lenguajes, especialmente de los del habla popular, porque esa es la manera en que han construido su hegemonía: afanando las palabras.


Pero en este marco de memorias que se cruzan, se solapan y parecen citarse entre sí, pareciera inevitable pensar que en algo nos han derrotado. Si frente a ese pequeño escalón hacia la Justicia que significa una sentencia a apenas 13 represores y por solo 69 casos (porque siempre serán apenas y solo), si en ese momento no podemos distinguir hacia donde y con quienes, más allá de los cómo, entonces en algo no han derrotado.

1 comentario:

Eduardo Bidegain dijo...

Estuve ahi, no en el momento del disturbio ya que nos habiamos retirado unos instantes antes, pero durante la sentencia no pude evitar que sentimientos de todo tipo me invadieran , tengo 40 años y desde los 13 años he tenido un odio reserbado en mis entrañas para este tipo de bestias que asecinaron los mejores cerebros de toda una generacion, cuando empezo la lectura de la sentencia estabamos con mi esposa al lado de una mujer de alrrededor 80 años que habia venido de Ayacucho sola, era la madre de una desaparecida, ella le dijo al oido en un momento a mi esposa que la que acaban de nombrar era su hija, la verdad que si tengo que rescatar un positivo de todos los que puede haber de una jornada así me quedo con esa imagen la de una madre que en un pueblo chico se debe haber bancado por décadas cualquier tipo de habladuría y por primera vez su hija así como otros desaparecidos pasaban de la infamia e impunidad criminal del proseso a estar
nombrados al menos en una expediente donde se juzga y se condena a alguno de los responsables del crimen que sufrieron por eso solo hecho yo creo que en algo hemos ganado, luego de haber sido derrotados en todo no nos olvidemos quienes fueron los que ganaron , yo siempre digo los que ganas imponen el discurso y si los que pierden no sacan conclusiones valederas de cara a la verdad de los errores terminan adoptando irremediablemente el lenguaje de los que ganaron. Sera por eso que todavia a pesar que la represíon y casería de brujas se organizo desde la cabeza de Juan Domingo Perón y desde el estomago del peronismo, para festejar un fallo como este se canta la marcha peronista. Que largo camino hay por delante y cuantos nos quedan por desandar.